jueves, 14 de mayo de 2009

¿Qué es la violencia doméstica?

Violencia Doméstica es la continuidad de una conducta reprochable degradante, de explotación económica, patadas y puños, encarcelamiento, abuso sexual, ahorcamiento, y homicidio. Desenfrenado, la violencia doméstica usualmente incrementa en frecuencia y severidad.
Muchas víctimas sufren todas las formas de abuso. El abuso verbal y emocional puede ser más tenue que el daño físico, pero esto no quiere decir que es menos destructivo para las víctimas. Muchas dicen que la cicatriz emocional toma mucho más tiempo en sanar que los huesos rotos.
El primer asalto que comete el agresor usualmente asombra a la víctima. Es muy difícil creer que la persona que te esta proclamando amor, devoción y dedicación te agreda. Aproximadamente el 20% de las mujeres que han sido agredidas por primera vez por su compañero ha sido durante el embarazo. Después, los episodios de violencia pueden ser más o menos frecuentes, más o menos prolongados o más o menos severos.
Las tácticas sin violencia para controlar usualmente están asociadas con conducta violenta. Asaltos violentos usualmente incrementan en su frecuencia y severidad con el tiempo. Cuando la violencia continua esta progresa, y el agresor puede comenzar a abusar a sus hijos y hasta dirigir la violencia y amenazas de agredir a sus amigos o familiares. Inclusive, los agresores que usan violencia sin tanta frecuencia le recuerdan a su compañera que sino cumple con sus ordenes volverá a pasar.

jueves, 7 de mayo de 2009

VIOLENCIA DOMÉSTICA

Según cálculos de organizaciones de mujeres, en Uruguay una mujer muere cada nueve días víctima de ataques de su actual o ex pareja.




Diariamente el Ministerio del Interior recibe unas veinte denuncias de agresiones de esta clase, cifra que ha aumentado fuertemente respecto a años anteriores -producto de que las víctimas sienten menos temor de dar a conocer esas situaciones-. Aun así, hay consenso para considerarla muy inferior a la real.




Los casos de violencia en el hogar superan a los delitos contra la propiedad. Sin embargo, no reciben la misma atención y la misma respuesta que estos últimos, generadores de verdaderas reacciones de pánico social y de una ola de demandas securitarias.



Cuando una víctima va a denunciar violencia doméstica a una
seccional de policía cualquiera y es recibida por personal no capacitado a
menudo eso vuelve más peligroso el caso, porque le recomiendan medidas inadecuadas o no las saben guiar, lo que puede provocar que esas mujeres bajen
los brazos y dejen en nada la denuncia




...Lo nuevo no es el fenómeno (la violencia doméstica ya existía y era muy grave mucho antes de que se la llamara así y de que perdiera invisibilidad) sino que se está tomando conciencia de él y de que hay que enfrentarlo con políticas de fondo. Es el primer paso para cambiar...